El alamense Arturo Márquez, referente de la composición en México, regresa al Festival Cervantino
ESPECIAL, oct. 26.- El afamado compositor mexicano Arturo Márquez es un asiduo al Festival Internacional Cervantino desde la década de los 70, siempre que tiene la oportunidad, camina gustoso por los mágicos callejones de Guanajuato, desde aquellos años acudía a la capital cervantina a los encuentros de música contemporáneos.
Fue justamente en un escenario cervantino como lo es la Alhóndiga de Granaditas en donde estrenó la cantanta Sueños, en 2005, la cual, se volverá escuchar en Guanajuato, sólo que ahora en el Teatro Juárez, con la Orquesta Filarmónica de Sonora y el Coro del Teatro del Bicentenario, con Laura Cmet como directora invitada.
Después de visitar los lugares más emblemáticos del Cuévano, Arturo Márquez, nacido en Álamos, Sonora, se siente como en casa, en un ambiente festivo, pero sin dejar de cuestionar el acontecer político y social de México y del mundo. A casi cuatro lustros de haber creado dicha cantata, las cosas no sólo siguen igual, sino peor.
“Yo siento que muchos estamos preocupados como compositores, por ejemplo, pero hablo también de los pintores, de escritores de coreógrafos y de todos los artistas. Es importante que la sociedad nos escuche, a lo mejor no somos tan directos”, enfatizó el Premio Nacional de Bellas Artes.
Adelantó que está por estrenar una obra en la que abordará la problemática de la pandemia de covid-19, con un texto de su amigo de Saúl Juárez. Es para coro y orquesta con metales y percusiones.
La presencia cervantina
El compositor Arturo Márquez expresó que la cantata Sueño que se escuchará otra vez, después de casi tres lustros, en el Cervantino, es una obra muy especial con cuatro movimientos.
“Es bastante emotivo, aunque complejo, estarla montando nuevamente. El primero de ellos tiene que ver con Guanajuato, es un es un texto que escribió un querido amigo, Guillermo Velázquez, de los Leones de la Sierra de Xichú, un trovador y decimero maravilloso. Encontré el texto del Sueño mi país, y decidí ponerlo en esta obra ‘Sueños’ porque justamente quería hacer una obra que hablara de los sueños de varios de mis héroes. Esta obra lejos de ser o de aparentar, sin ser populista es el sueño de cada uno de nosotros, como se habla en cada uno de los movimientos”.
Subrayó que no tiene que ver con que se sea de derecha o de izquierda, basta con que una persona sea humanista, y sienta.
“Los mexicanos lo vemos en las noticias, pero puedo decir que el sueño de mi país es un sueño todavía por cumplir, sabemos perfectamente que cada país tiene sus propios problemas y siempre estamos soñando en encontrar las soluciones para ser mejores. No importa la ideología que tengamos”.
En conferencia de prensa en la Sala Carlos Ximénez, del FIC, Arturo Márquez, considerado una referencia dentro de la composición en México, a la altura de Carlos Chávez y de Silvestre Revueltas, habló a detalle de cada uno de los movimientos de su Cantata.
El segundo movimiento tiene que ver con el sueño de la naturaleza, con el discurso del Gran Jefe Seattle, de la tribu de los Swamish, a Franklin Pierce, presidente de Estados Unidos, allá por 1854 cuando le querían comprar los terrenos donde siempre habían vivido.
“Él en ese momento no entendió exactamente cómo era eso de comprar la tierra, el viento, el cielo o los pájaros. Ese discurso se ha vuelto un referente para los ecologistas y para todos los que defendemos de alguna de alguna manera nuestra naturaleza, especialmente en estos momentos cuando estamos viendo el problema del cambio climático”.
El tercer movimiento, explicó, hace referencia a los aforismos de Gandhi, el gran pensador y luchador por la paz; él decía que si se practicara “el ojo por ojo, ya todo el mundo quedará ciego”.
El último movimiento de la cantata tiene que ver con el discurso de Martin Luther King, que da en la explanada en Washington sobre la desigualdad racial que imperaba en ese momento y que lamentablemente “sigue imperando en cada esquina de nuestro planeta, habla justamente de que nosotros como humanos tenemos el derecho de ser i iguales. Es un gran discurso que escuché cuando tenía como 17 años y que me ha acompañado durante toda la vida”.
Esos textos, como reflexiones y enseñanzas no caducan debido a que son como un gran eco para este momento, concluyó el compositor, cuyo Danzón número 2 es la obra mexicana y latinoamericana más interpretada por la mayoría de las orquestas del mundo.
La cantata Sueños se podrá disfrutar este jueves 26 de octubre en el Teatro Juárez, a las 21:00 horas.
Información de www.milenio.com
