
Cuando hasta los cactus mueren de sed
Un estudio reveló que el calor extremo y la sequía afectan la supervivencia de cactáceas en el Desierto de Sonora, generando tasas de mortalidad alarmantes.
ESPECIAL, may. 14 del 2025.- Los eventos combinados de calor y sequía extrema que vive México y prácticamente todo el planeta, provocan que, hasta los saguaros, cardones y grandes cactáceas, mueran de sed en el megadiverso Desierto de Sonora, advierte un estudio publicado en la revista Global Change Biology.
La investigación binacional México-Estados Unidos, encabezada por el doctor Ben Wilder, director de la Nueva Generación de Investigadores del Desierto Sonorense (N-Gen), alerta sobre las crecientes presiones climáticas sobre las especies de suculentas de la región, que pone en riesgo su supervivencia.
«Este esfuerzo comenzó después del evento extremo de calor y sequía de 2020–2021 que se sintió en todo el Desierto de Sonora, incluyendo la Península de Baja California, Sonora Continental y el suroeste de los Estados Unidos. Nuestros colegas en Baja California Sur comenzaron a reportar un amarillamiento extremo de los tallos de la pitaya dulce. Vimos esas fotos y decidimos que necesitábamos investigar qué estaba ocurriendo», dio a conocer el doctor en Botánica.
El estudio se realizó utilizando datos satelitales y de estaciones climáticas, analizando poblaciones específicas de plantas en Baja California Sur y Phoenix, Arizona, y posteriormente observando la respuesta fisiológica de las cactáceas de forma individual.
El reconocido doctor Ezequiel Ezcurra, co-líder del proyecto y profesor de Botánica y Ciencias Vegetales en la Universidad de California, Riverside, destacó que cada escala de análisis confirmó la gravedad y el alcance regional del evento de calor y sequía de 2020–2021.
«Los datos fueron inequívocos, los años 2020 y 2021 fueron los más cálidos y secos que ha experimentado el Desierto de Sonora desde que se tiene registro instrumental, y probablemente en mucho más tiempo, quizás como nunca antes. Además, fue caluroso y seco en todas partes; ninguna porción del desierto se salvó», reveló.
El aumento de temperaturas y la disminución de lluvias también se reflejaron en la vegetación de la región, según la interpretación que se hizo a partir de un Índice de Salud Vegetal basado en datos satelitales de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA).
La información obtenida demostró además que la sequía de más de dos décadas en el suroeste de Estados Unidos, se debe al calor elevado producto del cambio climático, que a su vez constituye el principal factor de estrés para la vegetación del Desierto de Sonora.
Más de mil saguaros marcados permanentemente en el Jardín Botánico del Desierto en Phoenix, así como poblaciones de cuatro especies de cactáceas columnares y un árbol suculento en la parte sur del Desierto de Sonora, en la Península de Baja California, mostraron elevadas tasas de estrés y mortalidad directamente relacionadas con el evento de calor y sequía de 2020–2021.
«Las poblaciones que analizamos mostraron tasas de mortalidad de alrededor del 10 por ciento o mayores inmediatamente después de 2020, eso está muy por encima de lo normal, que es de alrededor de dos por ciento para saguaros o sus parientes del sur, los cardones. Con tasas así, estas poblaciones no podrán mantenerse en el tiempo», explicó la doctora Sula Vanderplank, coautora del estudio e investigadora con sede en Baja California Sur.
Quemadura de la cactácea
El doctor Kevin Hultine, fisiólogo vegetal del Jardín Botánico del Desierto y coautor del estudio, detalló que las cactáceas están sufriendo más que otras plantas, debido a que su adaptación a ambientes áridos es solo superficial, porque sus raíces someras alcanzan límites críticos cuando las temperaturas son muy altas y no hay agua.
«Lo que estamos viendo es que el sistema fotosintético de las plantas se apaga y esto es lo que causa la caída de brazos y la pérdida de plantas enteras», indicó.
Las cactáceas gigantes maduras pueden perder su integridad estructural durante la sequía, ya que los tejidos que brindan soporte mecánico pierden turgencia (capacidad para retener líquido), al disminuir el contenido de agua en las células.
El color amarillo de los tallos en la pitaya dulce que dio origen a la investigación, también es consecuencia del calor y la sequía, un fenómeno que los autores del estudio denominaron «quemadura de la cactácea», que es una decoloración rápida de la piel de la especie vegetal durante periodos de calor y sequía extremos que conduce a un deterioro fotosintético permanente.
«Esa decoloración no se recupera. Al igual que usted o yo, una cactácea tiene su piel para toda la vida; no tiene hojas que pueda desechar y volver a crecer. Si la quemadura de la cactácea cubre gran parte del cuerpo de la planta, ya no puede producir los recursos que necesita para vivir», subrayó el doctor Ben Wilder, director de la Nueva Generación de Investigadores del Desierto Sonorense (N-Gen).
El lugar más caliente del planeta
En 2023, el Desierto de Sonora alcanzó una temperatura récord de 80.8 grados Centígrados (177.44 Fahrenheit), convirtiéndose en el lugar más caliente del planeta, superando incluso al Desierto de Lut en Irán.
De acuerdo con la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), la medición de calor extremo ocurrió en la parte del Gran Desierto de Altar, entre los municipios de General Plutarco Elías Calles y San Luis Río Colorado, en los límites de Sonora con Arizona.
El registro se logró mediante dos satélites que evalúan a diario los niveles de ozono en la atmósfera, en zonas con pocas nubes, y que detectan el calor infrarrojo emitido por la superficie para determinar la temperatura del suelo.
Por: Ernesto Méndes
Información tomada de: excelsior.com.mx