Libros de texto y calidad educativa
ESPECIAL, ago. 3.- Desde 2005 al primer trimestre de 2023 el promedio de escolaridad de la población de 25 a 64 años aumentó de 8.1 a 10.3 años de estudio, el más alto en la historia del país, de acuerdo con el reporte “Estadísticas a propósito del día mundial de la población – Datos nacionales” difundido el 6 de julio pasado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
También, de acuerdo al Inegi, la tasa nacional de abandono escolar para el ciclo escolar 2021/2022 fue el más bajo desde el ciclo 2000/2001 en tres de los cuatro niveles educativos.
Para el nivel primaria descendió de 1.9 a 0.5, para el de secundaria bajó de 8.3 a 2.9, para el de media superior disminuyó de 17.5 a 11.6. En el nivel superior aumentó de 8.3 a 8.8.
Otro dato del Inegi: del ciclo escolar 2010/2011 al ciclo 2020/2021 disminuyó el número de alumnos por maestro en tres de los cuatro niveles educativos.
En el nivel preescolar, bajó de 21 a 19, en primaria de 26 a 24 y en media superior de 15 a 12. Solo en secundaria se mantuvo en 16.
Los números anteriores significan que de alguna manera ha mejorado el sistema educativo nacional: hay más escolaridad, menos deserción y salones de clase menos atiborrados.
Sin embargo, la calidad de la educación que reciben niños(as) y jóvenes es defectuosa, como lo corroboran diversos estudios.
El examen PISA realizado en 2018 por la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) entre 600,000 estudiantes de 15 años de edad en 79 países y zonas económicas, México incluido, mostró que los adolescentes de nuestro país distan mucho de estar a la altura de los mejores del mundo.
En lo que a las habilidades en matemáticas de los estudiantes se refiere, nuestro país quedó en el lugar 62 con 409 puntos, en ciencia el 58 con 419 puntos, y en lectura en 54 con 420 puntos.
Los puntajes arriba anotados están muy por debajo de los obtenidos por los jóvenes de los tres países que ocuparon los tres primeros lugares: China (591 en matemáticas, 590 en ciencia y 595 en lectura), Singapur (569 en matemáticas, 551 en ciencia y 549 en lectura) y Macao (558 en matemáticas, 544 en ciencia y 525 en lectura).
Habrá que ver qué resultados obtuvieron los mexicanos en el examen PISA 2022 cuando se difundan en diciembre de este año.
El examen Planea de 2018, hecho a cerca de 105,000 estudiantes de sexto de primaria por el ya desaparecido INEE, reveló lo siguiente: En lenguaje y comunicación 49% tuvo un nivel insuficiente, 33% alcanzó un nivel básico, 15% tuvo un desempeño satisfactorio y solo el 3% fue sobresaliente. En matemáticas 59% mostró un nivel insuficiente, 18% logró un nivel básico, 15% tuvo un desempeño satisfactorio y apenas el 8% fue sobresaliente.
En pocas palabras, pocos de esos adolescentes poseían los conocimientos y habilidades suficientes para después cursar una preparatoria y carrera profesional de excelencia.
El examen Planea dejó de realizarse después de que el presidente Andrés Manuel López Orador decretó la extinción del INEE en mayo de 2019. Actualmente no se realiza una prueba similar.
La mediocridad del sistema educativo mexicano seguramente se incrementará al imponerse los nuevos libros de texto gratuitos y obligatorios que de acuerdo con los expertos muestran múltiples deficiencias.
Por Eduardo Ruiz-Healy
www.eleconomista.com.mx