Sorprenden a barco sardinero dentro de la bahía de Camahuiroa

Dirigentes pesqueros del norte de Sinaloa piden que se ponga orden en esta actividad

LOS MOCHIS, SINALOA, mayo 8.- Lugareños y visitantes de la zona recreativa de Camahuiroa, ubicada en la Bahía de Agiabampo, Sonora, se sorprendieron durante las primeras horas ayer por la presencia y operación en el lugar de un barco sardinero.

Y es que de acuerdo a las versiones de algunos de los lugareños, desde hace 20 años no ingresaba a esta zona un barco de esta naturaleza, y menos realizando las actividades de pesca de esta especie.

Además de que por el tipo de actividad que realizan, al practicar una pesca de arrastre, siempre se ha argumentado por parte de los dirigentes de las diferentes organizaciones pesqueras, que la operación de estos barcos causan serios daños a las distintas especies que se encuentran en reproducción, como es el caso del camarón, cuya pesca está restringida desde el pasado 23 mes de marzo.

La embarcación sardinera que ingresó a esta zona se llama Portola V.

Urge reglamentar

Leonel Sánchez Cota, presidente de la Federación de Cooperativas Pesqueras del Norte Sinaloa y Sur de Sonora, explicó que si bien la pesca de sardinas es legal, las autoridades deberían de reglamentar esta actividad por los graves daños que ocasionan al resto de las especies.

Indicó que no son pocas las ocasiones en que han solicitado a las autoridades competentes, en este caso Conpesca, que, al igual como ocurre con el resto de las pesquerías o especies marinas, como el camarón, también se imponga un periodo de veda para la sardina, pero esto no ha avanzado en los foros donde se ha planteado, ya que ellos siempre anteponen el argumento de defender la seguridad alimentaria de la población, y, por causas que desconocen, siempre la autoridad en turno les hace caso.

El dirigente pesquero de bahías insistió en la urgencia de que esta actividad, así como sucede con el resto de las pesquerías que tienen sus periodos de captura y sus vedas para que las especies se reproduzcan, también se sometan a un orden porque no es posible que estas embarcaciones anden laborando todo el año, incluso en zonas en donde otras especies están en plena reproducción, y las autoridades simplemente no haga nada.

Por Javier Vega

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