
Proyecto Saguaro en Sonora: el otro efecto Trump
Apenas llegada a Palacio Nacional, la presidenta Claudia Sheinbaum quiso mandar un mensaje que impactara en la economía y en los empresarios que miraban a México con algún escepticismo.
ESPECIAL, mar. 3.- Se reunió con empresarios estadunidenses y mexicanos y anunció inversiones privadas por 20 mil millones de dólares. En ese anuncio la acompañó Sarah Bairstow, líder de Mexico Pacific, que invertiría 15 mil de los 20 mil anunciados en un gasoducto de Texas a Puerto Libertad, Sonora, y una planta de licuefacción para surtir al mercado asiático.
El proyecto ya se había anunciado en el sexenio anterior y era uno que el gobernador de aquel estado, Alfonso Durazo, había presumido como el más importante de su administración.
El proyecto comenzó a tener problemas. El primero, sin duda, es que el anuncio era prematuro, ya que aún no se había asegurado, por parte del consorcio, el financiamiento de parte de fondos privados. Pero los problemas se acumularon. Organizaciones ecologistas comenzaron a ampararse por el daño que al Golfo de California le haría la entrada de buques enormes para cargar el gas, el daño a la vida marina sería terrible. Hubo protestas, la organización que encabeza el hijo de Jaques Cousteau encabezó a un grupo de defensoras de la vida marina en ambos lados de la frontera. El gobierno no decía nada. Y llegó Trump y su obsesión con China.
Hace una semana, una publicación estadunidense especializada en asuntos de energía y negocios, Energy Analitics, publicó: “El breve romance de Quantum Capital Group con México, o más específicamente con Mexico Pacific Ltd., aparentemente ha terminado. Esto, sin siquiera llegar a una decisión final de inversión para la fase inicial de la propuesta de la instalación de exportación de GNL Saguaro Energía de 30 millones de toneladas por año (MTPA) en Puerto Libertad, en Sonora, México”.
Igual que la planta de Tesla en Nuevo León que nunca existió, el factor Trump fue muy importante para disuadir a los inversionistas del fondo.
Y después de meses de silencio, el viernes el gobierno dijo algo: “Respecto al proyecto Terminal de Gas Natural Licuado GNL de Sonora, mejor conocido como Proyecto Saguaro, la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente informa que actualmente tiene cinco juicios de amparo en su contra que siguen su curso legal, por lo que no es posible iniciar cualquier trabajo de construcción hasta que estos se resuelvan”.
Un poco tarde, porque el proyecto ya estaba muerto. Pero más vale porque hay otros similares en la región.
Información de: www.milenio.com