Infancia sedentaria: 2 de cada 3 niños mexicanos no hacen suficiente ejercicio
El 40% duerme entre 9 y 11 horas diarias
ESPECIAL, ene. 19.- La mayoría de los niños mexicanos, entre 10 y 14 años de edad, son físicamente inactivos, ya que solo 1 de cada tres realiza 60 minutos diarios de actividad física de moderada a vigorosa, mientras que 8 de cada 10 pasan más de dos horas al día sentados frente a una pantalla electrónica y menos del 40% duerme entre 9 y 11 horas diarias.
La actividad física, tiempo sedentario y sueño, en un periodo de 24 horas, son interdependientes y claves para el desarrollo saludable de los individuos en esta etapa de la vida, destacaron especialistas del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) que participaron en el conversatorio virtual, “Escuela activa, infancia saludable: estrategias prácticas para promover hábitos saludables en el entorno escolar”, convocado por la organización civil Salud Justa Mx.
La doctora Alejandra Jáuregui, Directora del Departamento de Actividad Física y Estilos de Vida Saludable del Instituto Nacional de Salud Pública, quien abordó el tema: “Integrando el Movimiento, el Descanso y el Sueño en la Vida Escolar”, enfatizó la importancia de fomentar hábitos saludables desde edades tempranas.
Etapa escolar, período crítico
Explicó que la etapa escolar es un período crítico, donde niños, niñas y adolescentes consolidan habilidades fundamentales y lograrán un desarrollo integral que influirá en su salud física, mental y emocional a lo largo de sus vidas.
Mencionó que estudios recientes han demostrado que los mayores beneficios se obtienen cuando los niños y las niñas alcanzan un sano balance en los 3 comportamientos del movimiento, cuando:
Se realiza suficiente actividad física. Se limita el tiempo de pantallas o sedentarismo y se prioriza el sueño de buena calidad, con horarios consistentes.
La especialista señaló que los comportamientos del movimiento saludable contribuyen en conjunto a mantener un cuerpo saludable, mejorando la condición física, la salud ósea y funcional, lo cual además reduce el riesgo de desarrollo de enfermedades crónico-degenerativas en la edad adulta, como diabetes, hipertensión y cáncer.
Además, sus beneficios también se extienden al bienestar mental, ya que ayuda a manejar el estrés, mejorar el estado de ánimo y prevenir trastornos como la ansiedad y la depresión.
Al aumentar la actividad física, se reducen los comportamientos sedentarios y se mejora el sueño, indicó.
Asimismo, resaltó que la actividad física, específicamente a través del deporte, fomenta el trabajo en equipo, el compañerismo y el empoderamiento, ayudando a prevenir conductas de riesgo como las adicciones y los trastornos alimentarios.
Respetar las clases de educación física
Entre las estrategias para fomentar un balance saludable de los comportamientos del movimiento en la escuela, la especialista recomendó: respetar las clases de educación física que son parte del currículo obligatorio.
Incorporar pausas activas durante el horario escolar, fomentar recreos activos y actividades deportivas extracurriculares y diseñar programas que promuevan el desplazamiento activo, como caminar o andar en bicicleta.
Destacó que se debe educar a los estudiantes sobre la importancia de equilibrar actividad física, descanso y sueño.
Mientras que a nivel comunitario se debe promover la creación de espacios públicos seguros para actividades al aire libre y desarrollar programas comunitarios que incentiven el movimiento.
A nivel familiar, la especialista recomendó implementar rutinas saludables de sueño, como mantener horarios consistentes para dormir y despertar, así como evitar el uso de pantallas electrónicas una o dos horas antes de ir a dormir.
La doctora Gabriela Argumedo, Investigadora del Departamento de Actividad Física y Estilos de Vida Saludable del Instituto Nacional de Salud Pública, que participó con el tema: “El Poder Transformador de la Educación Física en la Formación Integral del Escolar” destacó los múltiples beneficios que conlleva a la salud física y mental el ejercicio, entre los que mencionó la autoconfianza, expresión de sentimientos, comprensión, trabajo en equipo, mejor manejo del éxito y del fracaso, comportamiento prosocial y rendimiento.
También mostró el panorama de la Educación Física en nuestro país, donde el 63.9% de las escuelas públicas de educación básica cuentan con áreas deportivas y recreativas; y el 76.8% con patios o plazas.
Además, indicó que solo el 51.7% de las escuelas primarias públicas cuentan con docente de Educación Física.
Entre las barreras de acceso para la realización de actividad física en niñas, niños y adolescentes mexicanos, mencionó el trabajo infantil y que el 61% de los padres no deja salir a sus hijos a jugar a la calle debido a la inseguridad que perciben en su barrio o colonia.
Disminuye actividad física
De acuerdo con los recientes datos publicados por el INEGI en el Módulo de Práctica Deportiva y Ejercicio Físico (MOPRADEF), en los últimos diez años el porcentaje de población activa físicamente disminuyó de 45.4 % en 2014 a 41.1 % en 2024.
El 26 % realiza actividad física con un nivel suficiente para obtener beneficios a su salud. El 41.1 % de las personas de 18 años y más, realizó actividad física en su tiempo libre y en áreas urbanas del país.
Tres de cada 4 personas activas físicamente contaban con instalaciones públicas en su colonia para realizar actividades físicas o deportivas. De este grupo, 85.1 % calificó las instalaciones como regulares o buenas y 12.8 %, como malas.
Por Genoveva Ortiz
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