Suicidio en adolescentes: ¿cuáles son las señales a las que se debe prestar atención?
ESPECIAL, sep. 10.- En México se suicidó una persona durante cada hora del 2023, una cifra que se incrementó a 8 mil 837, lo que equivale en promedio a 24 muertes diarias, según información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI),
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que la depresión es un trastorno mental común que afecta al 5 por ciento de la población adulta en todo el mundo. Esto tiene efectos negativos en el trabajo, escuela y en el desarrollo social, mientras que en casos graves puede conducir al suicidio.
En 2022, la tasa de suicidio más alta (11.6 por cada 100 mil) fue la del grupo de 25 a 29 años de edad, de acuerdo con el Inegi. La siguiente fue la del grupo de 30 a 34 años (11.0 por cada 100 mil). Por su parte, las tasas en niños y niñas (10 a 14 años) y adolescentes (15 a 19 años) fue de 2.1 y 7.7 por cada 100 mil, respectivamente.
¿Cómo identificar conductas suicidas en adolescentes?
Diversos especialistas señalaron en The Conversation que la conducta suicida es uno de los principales problemas de salud en la juventud en todo el mundo.
En el artículo publicado en el medio especializado en información científica, los especialistas explicaron que no existe una causa única por la que una persona intenta ponerle fin a su vida.
En otras palabras, el suicido es un fenómeno complejo donde la “persona trata de buscar una solución a una situación vivida como límite, a una enorme dificultad que le provoca un dolor intolerable que no sabe o no puede resolver de otra forma”.
Asimismo, los especialistas explicaron que para la familia puede resultar muy doloroso comprender las razones por las que un joven decide terminar con su vida. Además, señalan que en muchas ocasiones ni siquiera son capaces de entenderlo debido al estigma social que envuelve a las conductas suicidas.
“La conducta suicida surge como respuesta a un contexto biográfico y social determinado que el menor experimenta en función de sus circunstancias personales. Debemos recordar que ‘nadie se intenta suicidar sin una razón’, explican.
Factores de riesgo en el suicidio
Los especialistas detallan que, en general, existen dos tipos de factores de riesgo de la conducta suicida en adolescentes, los internos y los externos.
Los internos se vinculan a rutinas y a la conducta de la persona, como la falta de habilidades para resolver problemas, afrontamiento ineficaz de las dificultades, abuso del tiempo dedicado a utilizar los dispositivos electrónicos y los problemas de salud o estilos de vida poco saludables.
Por otra parte, los externos consisten en problemas familiares y sociales: familiares, como los antecedentes de problemas de salud mental, y la presencia de conflicto familiar u otros estresores, como las dificultades económicas en las familias.
Los especialistas también señalan que es importante prestar atención a las siguientes situaciones:
- La percepción de ser una carga para sí mismo, para las amistades o para la familia.
- La pertenencia frustrada, esto es, la experiencia de sentirse solo o desconectado de amistades, familia u otros círculos sociales valiosos.
- El atrapamiento o la percepción de estar bloqueado, sintiéndose sin escape, sin posibilidad de rescate e impotente para cambiar aspectos de sí mismo.
- La desesperanza (atribuciones negativas sobre el futuro y la posibilidad de que las cosas cambien).
Finalmente, es importante recordar que, en caso de detectar conductas suicidas en cualquier persona, es fundamental hacerle saber que se le acompaña y no minimizar sus emociones. Asimismo, es vital buscar el apoyo de profesionales con la intención de brindar el apoyo necesario para la persona.
Información de www.reporteindigo.com