Impulsado y apoyado por Alfonso Durazo, protegido por Nery Ruiz Arvizu en el IEES y con el INE a su favor, el etchojoense Jorge Alberto Elías Retes, en medio de excesos y despilfarro de recursos, pisotea la ley para ser de nuevo alcalde de Navojoa

ESCENARIO POLÍTICO

José René Rosas

La participación del alcalde y también candidato de Morena al ayuntamiento de Navojoa, Jorge Alberto Elías Retes, en la modalidad de elección consecutiva, el término correcto para la reelección al mismo cargo, no es para nada producto de la casualidad o que el período interino y la presente candidatura hayan sido fortuitas, caídas del cielo gracias a la buena fortuna del abanderado morenista; a la inversa, cada uno de los pasos dados por Elías Retes estuvieron en su momento bien medidos, los objetivos planteados se han cumplido al pie de la letra, cuando menos hasta el momento, porque aún falta conquistar la meta, un periodo adicional en el gobierno navojoense, impulsado y apoyado por el gobernador Alfonso Durazo Montaño, protegido por el INE y el IEES, los árbitros garantes del proceso electoral.

Cierto, los movimientos iniciales del alcalde en funciones tenían claramente  establecida la ruta a recorrer, primero las relaciones con los personajes clave en los niveles de mando de Morena, a partir de la llegada del Morena al poder en 2018 con Andrés Manuel López Obrador, uno de esos contactos es quien gobierna hoy a los sonorenses, Alfonso Durazo Montaño; asimismo, el finado Mario “Mayito” Martínez, el ex alcalde, también formó parte importante en los planes de Alberto Elías, ellos tres estuvieron implicados en un caso de soborno en la etapa del Mayito como administrador del SAT, promovido al puesto por Durazo, en la oficina hacendaria de Ciudad Obregón, previo al proceso electoral de junio de 2021, por adeudos y evasión de impuestos a la dependencia tributaria, de parte de las empresas gaseras que presidía Alberto Elías Retes en sociedad con otros empresarios. El soborno se consumó con la entrega de 20 millones de pesos, el asunto se archivó pero el dinero no ingresó a las cuentas de la Secretaria de Hacienda, sino a los gastos de la campaña del candidato a gobernador, el referido Durazo Montaño.

Para el periodo de la definición en las candidaturas de Morena y sus aliados, Mario “Mayito” Martínez resultó el elegido y para sorpresa de propios y extraños, Alberto Elías Retes apareció entre los aspirantes a regidores en la planilla de la coalición Juntos Seguimos Haciendo Historia, el resto es ya un episodio de sobra conocido, de edil en el Cabildo, Elías Retes sucedió en el gobierno morenista al desaparecido Martínez Bojórquez, a las vez, ahora es el candidato oficial buscando permanecer en el puesto un periodo adicional, una meteórica carrera política gracias a los oficios y voluntad de Alfonso Durazo. Es decir, con los pasos claramente definidos, el alcalde y candidato tiene además apoyos adicionales en la prioridad de hacerse del control del ayuntamiento, en conformidad a los intereses del grupo compacto detrás de su proyecto político, cuya cabeza visible es el empresario Francisco “Kiko” Islas Flores.

Si desde el mismo inicio de la campaña se levantaron voces para exigir la renuncia al cargo de Elías Retes en aras de garantizar el piso parejo, el candidato puso oídos sordos a esta doble situación, de hecho en lo que va de la etapa proselitista Elías Retes ha incurrido en faltas a la legislación electoral vigente, dando la impresión de sentirse protegido; en efecto, sí lo está y nada menos que por el juez del proceso, el árbitro de la elección, Nery Ruiz Arvizu, el presidente del Instituto Estatal Electoral y Participación Ciudadana de Sonora.

El vínculo con el abanderado a la reelección en el gobierno navojoense es Héctor Ruiz Arvizu, una especie de asesor de funcionarios y servidores públicos identificados con Morena, entre éstos se ubica al alcalde y candidato oficial a la presidencia municipal, Jorge Alberto Elías Retes; a través del parentesco  consanguíneo de los hermanos Ruiz Arvizu, Héctor es quien contacta los eventuales personajes que pudiesen necesitar de un plan de protección de cobertura amplia en el aspecto electoral, todo lo que sea competencia del IEES, con el solo requisito de pertenecer a Morena, candidaturas, registro, validación, fiscalización, regulación de las campañas, tiempos electorales y en general lo relativo a la legislación aplicable durante la jornada electiva  en marcha, un completo seguro de gastos médicos mayores, siendo precisamente este organismo el árbitro del proceso. Una vez hecha la negociación, costos y beneficios, se requiere el pago total o parcial, según se acuerde, para que el trato comience a cubrir lo pactado.

En otras palabras, idéntico al caso que nos ocupa, la candidatura de Elías Retes está blindada, por ello la confianza del alcalde candidato de no solicitar licencia al cargo para participar en la contienda y a la vez continuar ejerciendo el cargo, teniendo a su favor no sólo el aparato de gobierno disponible, también los recursos del presupuesto público, con esa ambiguedad de que es presidente municipal de ocho a tres de la tarde y el resto del día candidato de Morena a la reelección, desde cualquier óptica esto es inequidad, ventaja y ausencia de piso parejo respecto a los competidores de los otros partidos; haga lo que sea, Elías Retes no será sancionado ni siquiera amonestado. Un blindaje así cuesta y mucho, sin incluir el evidente derroche de recursos de la campaña del morenista, ¿Y los topes de gastos? Estarán maquillados con toda seguridad.

Sin embargo, quién investiga la actuación del órgano rector del proceso en Sonora y, sobretodo, determinar la probable comisión de un delito de parte del juez de la elección Nery Ruiz Arvizu, también de su hermano interviniendo en asuntos electorales, creando un conflicto de interés al titular del IEES, una institución en el papel autónoma, que debería defender los derechos electorales de los ciudadanos sonorenses, evidentemente al servicio del gobierno estatal y de Morena? Pero para qué los golpes de pecho si el INE, el órgano superior ya demostró de parte de quien está aplicando la ley mordaza, a un medio de comunicación propiedad del adversario que  más peligro supone  para el candidato oficial, no obstante, cierra los ojos a los excesos y a la doble cara, según la conveniencia, del alcalde candidato, el etchojoense Jorge Alberto Elías Retes. El contexto es grave, un atentado vil a nuestra incipiente democracia, la simulación del gobierno de Morena y Alfonso Durazo Montaño, una grotesca burla al pueblo de Sonora, no importa cumplir la ley ni socavar las instituciones, al fin no se les fincarán responsabilidades.