Sonora cierra 2023 con 55% menos agua en presas; dos se encuentran secas
HERMOSILLO, Sonora, dic. 13.- Por la escasez de lluvias en todo el territorio sonorense, este año el Estado tiene un 55% menos de agua almacenada en las presas comparado con el 2022 y hay dos que están en 0% de su capacidad.
Según el Organismo Cuenca Noroeste de la Comisión Nacional del Agua, en el reporte que publicó ayer en sus redes sociales, la entidad dispone de 2 mil 399.8 millones de metros cúbicos y el año pasado en la misma fecha había 5 mil 300.9.
Las cuatro presas de la cuenca del Río Yaqui registran el mayor almacenamiento de agua, al mantener su capacidad entre el 28.4% y 50.7%, en segundo lugar se encuentran las dos del Río Mayo con 19.8% y 6.8%, el Río Sonora está en 9.4% y el Río de Altar en 3.2%.
La presa Ignacio R. Alatorre, mejor conocida como Punta de Agua, ubicada en el Río Mátape y la Abelardo L. Rodríguez hasta el día de ayer el reporte de acumulación de agua era de 0%, mientras que el año pasado la primera llegó al 63.7% y la segunda al 10.3%.
En el 2022 las presas Lázaro Cárdenas y Abraham González, de la cuenca del Río Yaqui, registraron una capacidad de 97.8%, mientras que la Álvaro Obregón de 50.3% y la Plutarco Elías Calles de 72.9%.
El año pasado la presa Adolfo Ruiz Cortines llegó a 70.3% y la Bicentenario a 7.4%, y este año la primera reportó 19.8% y la segunda 6.8%, lo que significa entre un 65 y 71% menos.
EN RIESGO PRÓXIMO CICLO AGRÍCOLA SI NO LLUEVE: DISTRITO DE RIEGO
CIUDAD OBREGÓN, Sonora.- El nivel actual de las presas garantiza la terminación del presente ciclo agrícola, sin embargo, de no presentarse lluvias en lo que resta del invierno o el próximo verano, el siguiente estaría en riesgo, destacó Luis Cruz Carrillo.
El presidente del Distrito de Riego del Río Yaqui (DRRY) explicó que los pronósticos de lluvia para los próximos meses no son favorables, por lo que solo resta esperar que todo vaya cambiando positivamente.
Actualmente, dijo, se tiene un plan de riego sumamente ajustado, al cual se le está dando puntual seguimiento para que los productores estén aplicando los riegos adecuadamente sin desperdiciar nada de agua.
Por Yesicka Ojeda y Mayra Echeverría
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