Proyectan reconversión de cultivos en el sur de Sonora
Representante de Sader en Sonora señala que el próximo ciclo se sembrará al menos 40 mil hectáreas de cártamo y 60 mil de cebada.
CIUDAD OBREGÓN, SONORA, ago. 4.- Con la siembra de al menos 40 mil hectáreas de cártamo y 60 mil de cebada durante el ciclo agrícola 2023-2024 comenzaría la reconversión de cultivos en los Valles del Yaqui y Mayo, informó Plutarco Sánchez Patiño.
El director de la Representación de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) en Sonora manifestó que los productores han tenido apertura ante los cambios que se vienen para los próximos ciclos agrícolas, esto luego de los retos a los que se han estado enfrentando en las últimas temporadas en cuanto temas de costos de producción, mercado y rentabilidad.
Queremos que crezca el maíz harinero, el cártamo y también la cebada, se ha platicado con grandes industrias cerveceras y aceiteras y están muy interesados en que Sonora les venda, todo depende de los productores, es un trabajo en equipo.
“En agosto tenemos nuestra primera reunión para afinar detalles del próximo ciclo agrícola y que estos tengan el mejor rendimiento y mayores ingresos, siempre cuidando el agua”, subrayó.
Señaló que están buscando de la mano del Gobierno federal darles a los agricultores garantías y apoyos en sus corridas financieras, para que se sientan seguros ante los cambios que se avecinan.
“Estamos planteando con el Gobierno federal iniciar con 40 mil hectáreas de cártamo y unas 60 mil de cebada o subirle más a la cebada, porque el cártamo a veces se topa por las industrias y la cebada tiene más mercado y mucho más rendimiento”, comentó.
Recordó que sembrar trigo hace tiempo dejó de ser redituable y por ello se debe apostar a la reducción de la extensión de siembra y apostarle a otros cultivos para solucionar los problemas de comercialización.
Abel Castro Grijalva, presidente de la Alianza Campesina del Noroeste (Alcano), manifestó que el tema de reconversión es algo muy complicado, ya que conlleva muchos riesgos.
“Está muy difícil por la comercialización, ya ven lo que pasó con el trigo y maíz, sigue siendo una incertidumbre, y además tienen menor precio en el mercado, pero no hay nada claro aún, hay que seguir viendo, a lo mejor si hay las posibilidades”, resaltó.
Subrayó que pese a lo anterior, están abiertos a cambios y lo que los gobiernos tengan para plantearles, siempre y cuando sea para mejorar el panorama agrícola.
Por Mayra Echeverría
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