Esta es la historia de Brian May, el guitarrista de Queen que trabaja en la NASA

En una sorprendente convergencia de sus pasiones, Brian May se ha convertido en colaborador de la NASA

ESPECIAL, ago. 18.- La historia de Brian May es una fascinante mezcla entre la pasión por la música, la ciencia y la exploración espacial. Conocido en todo el mundo como el legendario guitarrista de Queen, May no solo dejó una marca imborrable en la industria musical, sino que también se ha convertido en un colaborador clave para la NASA en su búsqueda de comprender los misterios del universo.

Nacido en 1947 en Hampton, Reino Unido, May creció en un entorno familiar donde la música tenía un lugar central. Desde una edad temprana, mostró un talento innato para la música, comenzando a tocar el piano y, más tarde, encontrando su verdadera pasión en la guitarra. Durante sus años de estudiante de física en el Imperial College de Londres, conoció al baterista Roger Taylor, lo que eventualmente condujo a la formación de la banda ‘Smile’.

No fue sino hasta la llegada del icónico cantante Freddie Mercury en 1970 que ‘Smile’ se transformó en Queen, una banda que rápidamente se convirtió en una de las más influyentes y exitosas de la historia del rock. May, con su estilo distintivo de tocar la guitarra y sus habilidades como compositor, contribuyó en gran medida al sonido único y la popularidad avasalladora de Queen. Éxitos como ‘We Will Rock You’, ‘Bohemian Rhapsody’, ‘I Want to Break Free’ y ‘Don’t Stop Me Now’ se convirtieron en himnos generacionales.

Pero la carrera de May no se limitó solo a la música. En un giro sorprendente, en 1965 inició su carrera científica como físico, embarcándose en un camino que lo llevaría a la astrofísica. A pesar de un intervalo musical de 40 años, nunca perdió su pasión por la ciencia y finalmente completó su doctorado en astrofísica en 2007. May expresó su perseverancia al afirmar:

«Espero que esto los inspire en su propio viaje, pueden lograr lo que desean».

En 2016, May forjó una conexión notable con la NASA al unirse a la misión OSIRIS-REx, que tenía como objetivo recoger muestras de un asteroide cercano a la Tierra llamado Bennu. Su experiencia como astrofísico y su capacidad para analizar imágenes y datos fueron vitales para determinar un lugar seguro para la recogida de muestras sin poner en peligro la nave. May, junto con el experto en ciencias planetarias Dante Lauretta, se prepara para lanzar un libro que presenta un atlas tridimensional completo del asteroide, una ventana al pasado distante que puede revelar secretos sobre el origen de la vida.

La relación de May con la NASA no se detiene ahí. Desde 2015, colabora con el equipo de New Horizons, participando en la exploración de Plutón y contribuyendo a analizar datos en tiempo real. Su habilidad para combinar su amor por la música, la ciencia y la exploración espacial ha demostrado ser única y valiosa.

La historia de Brian May es un recordatorio poderoso de que las pasiones no tienen que limitarse a un solo campo. A través de su música y su compromiso con la ciencia, ha dejado un legado que continúa inspirando a personas en todo el mundo. Su viaje desde los escenarios de rock hasta los confines del espacio exterior es un testimonio de la capacidad humana para perseguir múltiples sueños y lograr lo inimaginable.

Por ALEXIS EMILIANO MÁRQUEZ

www.lasillarota.com

Botón volver arriba