El Exceso de Redes Sociales: Un Desafío para la Infancia y la Adolescencia
SONORA, feb. 9.- En la era digital, las redes sociales son una parte integral de la vida de niños y adolescentes. Sin embargo, su influencia no siempre es positiva. El acceso constante a una avalancha de información, muchas veces inexacta o irrelevante, está afectando gravemente a nuestra juventud. En primer lugar, es esencial reconocer que las redes sociales permiten la conexión con amigos y familiares, el acceso a noticias importantes y la posibilidad de expresarse de manera creativa. Sin embargo, estos beneficios se ven eclipsados por el exceso de información inútil y la adicción que muchas veces provoca.
La adicción a las redes sociales es una realidad preocupante. Los adolescentes y niños pasan horas desplazándose por sus feeds, buscando la próxima dosis de aprobación social a través de «me gusta» y comentarios. Esta búsqueda de validación puede tener un impacto devastador en la autoestima y la salud mental de los jóvenes.
El lenguaje utilizado en plataformas como Twitter o Instagram es breve y propenso a abreviaturas y neologismos que a menudo carecen de sentido fuera del mundo virtual. Esta comunicación simplificada inhibe la adquisición de un vocabulario rico, y también dificulta la capacidad de mantener conversaciones significativas y profundas en la vida real.
La sobreexposición a contenido banal y superficial en las redes sociales también está socavando la capacidad de los jóvenes para discernir información valiosa de la basura digital. La obsesión con la imagen y la apariencia personal, promovida por plataformas de redes sociales, puede conducir a problemas de imagen corporal y una búsqueda constante de aprobación externa.
Es fundamental reconocer que las redes sociales pueden tener un papel positivo en la vida de los jóvenes cuando se utilizan de manera equilibrada y reflexiva. Sin embargo, es responsabilidad de los padres, educadores y la sociedad en general abordar el exceso de redes sociales y sus consecuencias negativas. La adicción a las redes sociales debe ser tratada como una enfermedad que requiere terapia psicológica y apoyo emocional.
Las redes sociales han saturado a la niñez y a la adolescencia con información que a menudo es inútil, promoviendo la adicción y socavando el desarrollo de habilidades esenciales. Es crucial fomentar un equilibrio saludable entre el mundo digital y la vida real para que los jóvenes puedan crecer de manera saludable y desarrollar habilidades sociales y lingüísticas necesarias para su éxito futuro.
Por Zulema Trejo Contreras, Profesora investigadora de El Colegio de Sonora
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